DISLEXIA

 1. Concepto: 

Dificultad para aprender a leer y por tanto a escribir, que presentan niños cuyo coeficiente intelectual es normal.

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2. ¿Cómo Detectar la Dislexia en Casa o en la Escuela?

Dificultad para aprender a leer y por tanto a escribir, que presentan niños cuyo coeficiente intelectual es normal.

Se puede esperar que en cada aula de 25 estudiantes haya un niño con dislexia.

Es un problema cognitivo que afecta las habilidades lingüísticas.

La dislexia es un problema de aprendizaje que crea un tipo de personalidad en el aula: conductas disruptivas, hablar, pelearse y no trabajar.

La dislexia va unida a otros problemas de aprendizaje escolar, tales como la disgrafia (dificultades en el trazado correcto, en el manejo de renglón y tamaño de letra), disortografia (dificultades de seguir reglas de ortografía), dificultades de pronunciación (pronunciar palabras que tengan diferente tipo de combinaciones de letras).

Retraso en el aprendizaje de la lecto – escritura.

Tendencia al deletreo.

Escasa comprensión lectora.

Bajos resultados escolares.

Bajo autoconcepto.

Al niño se le caracteriza como “vago” y distraído.

En el siguiente cuadro se resume de manera clara como detectar la dislexia según la edad cronológica:

¿Cómo Detectar la Dislexia en Casa o en la Escuela?
EDUCACIÓN INFANTIL	NIÑOS HASTA 9 AÑOS	NIÑOS ENTRE 9 Y 12 AÑOS	NIÑOS DE 12 AÑOS EN ADELANTE
Antecedentes Familiares.	Particular dificultad para prender a leer y escribir.	Continuos errores de lectura, lagunas comprensión lectora.	Tendencia a la escritura descuidada, desordenada, en ocasiones incomprensible.
Retraso en aprender hablar con claridad.	Persistente tendencia en escribir los números en espejo o con orientación inadecuada.	Forma extraña de escribir, con omisiones de letras, o alteraciones del orden de las mismas.	Inconsistencias gramaticales y errores ortográficos, a veces permanencia de las omisiones, alteraciones y adiciones de la etapa anterior.
Confusiones en la pronunciación de palabras que se asemejan por su fonética.	Dificultad para distinguir la izquierda de la derecha.	Desorganización en casa y en escuela.	Dificultad para planear y redactar relatos y composiciones escritas en general.
Falta de habilidad para recordar el nombre de serie de cosas, por ejemplo: los colores.	Dificultad de aprender el alfabeto y las tablas de multiplicar, y en general para retener secuencias: los días de la semana, los dedos de la mano.	Dificultad para copiar cuidadosamente en el cuaderno.	Tendencia a confundir las instrucciones verbales y los números telefónicos.
Confusión en el vocabulario que tiene que ver con la ubicación espacial.	Falta de atención y concentración.	Dificultad para seguir instrucciones orales.	Gran dificultad para el aprendizaje de las lenguas extranjeras.
Alternancia de días buenos  y malos en el colegio sin razón aparente.	Frustración, inicio problemas de conducta.	Aumento de la falta de autoconfianza y frustración.	Baja autoestima.
Mayor habilidad manual que lingüistíca.		Problemas de comprensión del lenguaje oral e impreso.	Dificultad en la percepción del lenguaje, por ejemplo en seguir instrucciones.
Dificultad para aprender las rimas típicas del preescolar.		Problemas conductuales: impulsividad, corto margen de atención, inmadurez.	Baja Comprensión Lectora.
Dificultad para las secuencias.			Aparición de conductas disruptivas o de inhibición progresiva, a veces depresión.

3. Recomendaciones:

Es importante que docentes y padres de familia sigan las siguientes sugerencias:

PADRES DE FAMILIA	DOCENTES
Brindar apoyo emocional y social.	Interesarse por el niño. Hágale saber que puede preguntar sobre lo que no comprenda.
Comunicarle que se le seguirá queriendo, aunque no pueda ir especialmente bien en el colegio.	Evaluar sus progresos en comparación con el mismo, no con el de los demás.
Dejarle muy claro al niño que puede llegar a tener “éxito” en las actividades escolares.	Dele atención individualizada siempre que sea posible.
Explicarle al estudiante las características de un estudiante con dislexia, que acepte con normalidad su dificultad.	Dividir las lecciones y actividades en partes, paso a paso que las comprenda.
No realizar comparaciones entre hermanos, cuando estos no tienen dislexia.	Repetir la información más de una vez, debido al problema de distracción y memoria a corto plazo.
Desarrollar autoestima en todos los niveles.	Requiere más práctica para dominar una técnica.
Comprender de manera paciente las dificultades a las que lleva la dislexia, como la confusión de las horas del día, el desorden, sin bajar los niveles de exigencia requeridos.	Necesitará ayuda para relacionar los conceptos nuevos con la experiencia previa.
Remitir al niño con especialistas en dislexia: psicólogo, terapeutas de lenguaje.	Dele tiempo: para organizar sus pensamientos, para terminar sus trabajos. En especial para tomar apuntes.
	Alguien puede ayudarle leyéndole el material de estudio y en especial los exámenes.
	Evitar la corrección sistemática de todos los errores en su escritura. Hacerle notar aquellos sobre los que está trabajando en cada momento.
	Si es posible hacerle exámenes orales.
	Asignar trabajos ligeros y breves. No aumentar su frustración y rechazo.
	Es fundamental hacer observaciones positivas sobre su trabajo.
	Buscar oportunidades de que participe en clase.
	Permitirle aprender de la manera que sea posible, con los instrumentos alternativos a la lectura y escritura que estén a nuestro alcance: calculadoras, tablas de datos, magnetófonos.

Fuente: http://www.psicopedagogia.com/dislexia